"LÓGICA" PARTIDISTA

La situación a la que se enfrentan nuestros hermanos portugueses,tras la intervención acordada por el Consejo de Ministros de Economía y Finanzas de la Union, pone de manifiesto a  que conduce la "LOGICA" partidista, de obstaculizar desde la oposición cualquier medida del gobierno con tal de provocar su caída y adelantar la celebración de elecciones.
 Tres planes de medidas había presentado el Primer Ministro Portugués, Sócrates Gomes, a la Asamblea de la República antes de tirar la toalla, al verlas rechazadas por la Derecha y la oposición de Izquierdas. Seguro que cualquiera de ellas hubiera exigido menos sacrificios a los portugueses que los que se verán ahora obligados a hacer tras la petición de ayuda al fondo de rescate de la Union Europea. Pero, al parecer, para algunos, conseguir adelantar algunos meses su llegada al poder es bastante más importante que intentar salvar la economía del pais, cuanto antes y al menor coste posible,...pues la LOGICA partidista parece significar que no se debe jamas echar una mano al adversario, aunque se esté de acuerdo con las medidas que éste quiera adoptar desde el gobierno, que no importa "pegar una patada en el trasero a los ciudadanos, cuando quiere dársela en el del gobierno", puesto que se espera que si, las cosas van mal, el que se desgasta es el que gobierna, sobre todo si uno no se "moja", de modo que " cuanto peor, mejor", y que lo único importante es alcanzar el poder cuanto antes.
Es la misma LOGICA de nuestra oposición mayoritaria. Desde hace meses, ante la crisis, no le preocupa sino adelantar las elecciones generales, como si su llegada al poder fuese por si misma el balsámo de fiebrabas que cura todo, que nos hará salir de la crisis, creando, como decía este fin de semana Rajoy, desde León, un millón de nuevas pequeñas empresas. Desde luego lo que no nos cuentan es como lograrán hacerlo, ni si tienen alguna varita mágica para ello, y mucho menos nos desvelan (salvo en un descuido, como ha hecho el Presidente de la Región de Murcia, hablando de "copago") en que consistirán las medidas restrictivas que habrán de tomar y si éstas diferirán de las que han venido adoptandose desde mayo del pasado año, dictadas desde la Union Europea, salvo para ser aun mas duras, más parecidas a las de Cameron en el Reino Unido (que en otro descuido-esta vez del propio Rajoy- afirmaron que era el modelo a imitar), porque, desde luego resulta difícil pensar que el PP pretenda reducir de nuevo la edad de jubilación a los 65 años, aumentar el sueldo de los funcionarios o endurecer las condiciones del despido laboral.
La reiterada petición de ¡Elecciones, ya! no ha amainado con el anuncio de Zapatero de que no volverá a ser el candidato del PSOE a la presidencia del gobierno, sino que se ha recrudecido. Ahora resulta que, porque el Presidente del Gobierno anuncie que no va a intentar serlo durante un nuevo mandato, se produce un vacío de poder que exige la disolución de las Cortes y la convocatoria de elecciones.
En el caso de Aznar, al perecer, era distinto: ni vacío de poder, y necesidad de nuevas elecciones, ni bicefalia, porque haya un presidente en ejercicio y un candidato a presidente, distinto, del mismo partido. ¿Será por la forma de designar al nuevo candidato? Si es a dedo, como ocurría en Mexico en los tiempos en que el PRI gozaba de un poder omnímodo, esta claro que el presidente en ejercicio no pierde poder alguno, sino que, en realidad, pretende conservarlo a través del designado. Algunos pensamos, sin embargo, que es mejor que no se produzca ningún "dedazo", que es más democrático, y que ello no conlleva,- como ponen de relieve otros paises con una democracia más arraigada que la nuestra,-vacío de poder alguno, porque el que este en ejercicio no pretenda, o no pueda, repetir mandato y surja un nuevo candidato en su propio partido.
 La famosa tesis del "pato cojo", relativa a los presidentes norteamericanos, nada tiene que ver con la situación a la que nos estamos refiriendo. La consideración de "pato cojo", incapaz de tomar decisiones, no se ha aplicado nunca a los presidentes norteamericanos al final de su segundo mandato, al no poder presentarse a una nueva reelección -cosa que sucede solo desde que a raíz de las tres reelecciones de Franklin Delano Rosevelt se aprobó una enmienda a la Constitución en este sentido-, sino antes, por el largo periodo que transcurría -precisamente hasta la primera elección de Roosvelt, en 1932- entre las elecciones, el primer martes de noviembre, y la toma de posesión del presidente elegido, que tenia lugar en el mes de Marzo - que se adelanto al mes de Enero, cuando tiene lugar en la actualidad. Convivían, pues, durante varios meses un Presidente en ejercicio y un Presidente electo y, como ocurre en un sistema parlamentario, desde las elecciones a la constitución de las nuevas Cámaras y la votación de confianza que determina el
nombramieento de un nuevo Presidente del Gobierno, un presidente, o un gobierno, en funciones no puede, ni debe, tomar determinadas decisiones, salvo las necesarias para asegurar la gobernabilidad del pais. Pero ni muchos de nuestros políticos ni de nuestros comentaristas políticos (salvo Sahagun, en El Mundo) se han preocupado de saber que es un "pato cojo" y si ahora pueden añadir ese calificativo, inapropiado, a los restantes innumerables improperios que se han lanzado contra Zapatero, comenzando por el de inepto y traidor (que se aplicaron, también, en su día, a Adolfo Suarez)... tanto mejor.